Por Tana Rendón
Por Tana Rendón
Lo que no vemos
¡Bienvenidas de nuevo!
A mi espacio favorito. Uno que inició en el 2009 y que hoy tiene un nuevo sabor y perspectiva. ¡Quiero contarte todo lo nuevo que tenemos preparado para ti! ¿Me acompañas?
Erika G
abril 7, 2014no entiendo ese afán de los diseñadores, de que sus modelos no sonrían, cuando uno ve una ropa, en una modelo sonriente y divertida te imaginas que está muy cómoda con la ropa, y tú la quieres, para sentirte y verte igual. cuando ves a la modelo increíblemente sería o con esos maquillajes estrambóticos, te es difícil identificarte, no es para cualquiera, hay gente como tú, que seguro ya está acostumbrada, pero yo por lo general les tapo la cara pa apreciar bien la ropa- 🙁
Tana Rendón
abril 7, 2014Es que en realidad par la mayoría de desfiles lo que importa básicamente es la ropa. Cuando una modelo sonríe con dientes a veces nos quedamos mirando más a la chica que lo que tiene puesto. Es por ese mismo propósito por el que tienen una cara de Monalisa. Como cualquier trabajo, hay requerimientos específicos y las modelos los cumplen según lo que quiera el diseñador o estilista. Ni modo :p..
Rocío Gallegos
abril 7, 2014Oh~ siempre tenía esa duda de que por qué no podían sonreír las modelos…Eso muestra solo una pizca del mundo exigente de la moda y que no es tan fácil como mucha gente piensa/menosprecia (aunque bueno no creo que sea tan como mis guardias del hospital jajaja)
Tana Rendón
abril 8, 2014Jajajaja Rocío!! exactamente. Hay estas exigencias en todo lo que nos queramos dedicar al 1000 % 🙂
clau
abril 10, 2014que duro!